Las últimas oleadas de consumo en el canal online me han recordado que, como en el mundo del surf, conocer dónde y cómo colocarte para coger una ola, te permite poder surfear, sea con mejor o peor estilo…
El canal online en España supera los
40.000 millones de euros con crecimientos sostenidos de dos cifras anualmente. Para los que están
presentes en ese canal, representa en torno al
5% de su facturación total. Aquellos que
cuidan su estrategia, consiguen un
10% de ingresos mediante el e-commerce, y los que además de elaborar un plan invierten en
herramientas basadas en datos de tiempo real se acercan al
40%.
Soportar y resolver cualquier problema durante la
experiencia de compra depende de su correcta identificación y para ello necesitamos apoyarnos en las herramientas correctas. Herramientas basadas en
Inteligencia Artificial y Machine Learning nos ayudan a gestionar ingentes volúmenes de información de manera eficiente. Hasta hoy nos hemos basado en
datos parciales, poco actualizados y en pálpitos o sensaciones. Para mi es imprescindible conocer la playa, la previsión, tu tabla y tu cuerpo.
Muchas compañías ya utilizan herramientas de
monitorización y análisis para aprovechar los vacíos de información de las marcas a nivel de distribución. Consiguen así llegar
dónde su competencia no llega y con mejor timming e identificar realidades que se escapan ahora de nuestra comprensión, como el
mercado gris o puntos de venta no autorizados. Si puedes interpretar bien todas esas informaciones, estás en una mejor posición para saber cómo, cuándo y a quién atacar. Entrenar cuando baje la marea, observar la ola y montar en ella el momento correcto, de eso se trata.
Al aumentar la eficiencia en la
distribución (seamos marcas, distribuidores o sellers) mejoramos nuestros márgenes,
simplificamos nuestro trabajo y la salud de nuestras compañías. Debemos apoyarnos en las herramientas adecuadas para mejorar, y
el 63% de las empresas que usan IA aumentan más de un 10% sus ingresos (McKinsey, Global AI Survey, 2019).
No conocer las condiciones del mar en absoluto, te puede dar un buen susto, un revolcón o que pierdas la mañana sin coger una sola ola… la información bien gestionada lo es todo. El resto ya es lo que dependerá de nosotros.